● Dominio de Atauta, La Roza 2018 de es el único vino de Ribera del Duero que obtiene la máxima puntuación dentro de la Guía Peñín 2025.
● Este notable reconocimiento se complementa con otras puntuaciones de renombre internacional como los 98 puntos de Wine Advocate (Robert Parker)
● Esta referencia forma parte de la colección Single Vineyards de Dominio de Atauta, la cual ha obtenido notables puntuaciones en la Guía Peñín, entre ellas: 98 puntos de San Juan, 97 de Valdegatiles, 96 de Llanos del Almendro y 94 puntos para La Mala.
● Bodegas Dominio de Atauta se fundamenta en una tradición vitivinícola de más de cinco siglos en un valle único, caracterizado por condiciones extremas, con altitudes elevadas, clima seco y grandes oscilaciones térmicas.
● Dominio de Atauta, La Roza 2018 está disponible en una edición limitada de solo 581 botellas.
● Dominio de Atauta La Roza 2018, el vino elaborado por Bodegas Dominio de Atauta (D.O. Ribera del Duero), ha sido reconocido con 100 puntos en la Guía Peñín 2025, la máxima puntuación otorgada por esta prestigiosa publicación, considerada la principal referencia en el mundo del vino español.
Dominio de Atauta La Roza 2018 es uno de solo ocho vinos destacados en esta edición, un selecto grupo que, según la Guía, «han sobresalido y representan la más alta expresión del vino español». En su análisis, la Guía Peñín destaca que esta referencia es «la mejor expresión del terruño desde la Ribera del Duero soriana«.
Este notable reconocimiento se complementa con otras puntuaciones de renombre como los 98 puntos de Wine Advocate (Robert Parker), la publicación de mayor prestigio en el panorama vinícola internacional, consolidando así Dominio de Atauta La Roza 2018 como uno de los vinos más destacados a nivel global. Estará disponible en una edición limitada de tan solo 581 botellas.
La Roza 2018 forma parte de la exclusiva colección de vinos de parcela de Dominio de Atauta. Desde su llegada al Valle de Atauta en el año 2000, la bodega se ha dedicado a expresar la singularidad de este enclave único, un valle de apenas 4 km de largo y 1 km de ancho, cuyas condiciones extremas permiten crear vinos de calidad excepcional y personalidad única.
Además de La Roza, el resto de los vinos de la colección Single Vineyards de Dominio de Atauta han obtenido igualmente excelentes puntuaciones. Desde los 98 puntos de San Juan, los 97 de Valdegatiles, 96 de Llanos del Almendro hasta los 94 de La Mala.
Por su parte, Dominio de Atauta, el buque insignia de la bodega ha obtenido 95 puntos y Parada de Atauta, el vino que da entrada al porfolio de la bodega, 94. Dominio de Atauta Dos Fincas, el proyecto cuya primera añada sacó la bodega el año pasado ha recibido 96 puntos. Con estas puntuaciones prácticamente todos los vinos de la bodega se sitúan en el podio de la Guía Peñín donde se encuentran los mejores vinos españoles y como el proyecto mejor valorado de la Ribera del Duero.
“Estar en esta posición tan destacada en una zona vinícola como Ribera del Duero, donde conviven proyectos históricos nos hace muy felices y nos anima a seguir trabajando cada día”, explica Jaime Suárez.
Este logro es el resultado del esfuerzo constante de Bodegas Dominio de Atauta, que desde su fundación en 2000 se ha dedicado a recuperar viñedos históricos como La Roza y a mostrar la singularidad de un valle con más de 500 años de tradición vitivinícola.
UN MINUCIOSO PLAN DE RECUPERACIÓN
La Roza es un viñedo de 190 años, un pequeño paraje que se encontraba abandonado, hasta que, en 2010, Ismael Sanz, se incorpora como responsable de viticultura, un año después de la entrada de la bodega en Terraselecta, compañía vinícola que, en ese momento, iniciaba su andadura en busca de viñedos singulares que mostraran la personalidad de diferentes territorios vinícolas españoles.
En ese contexto, Ismael inició un proyecto de recuperación de viñedos históricos a punto de desaparecer, siendo La Roza uno de ellos. “Hace 15 años La Roza era un viñedo abandonado y por eso, recibir hoy esos 100 puntos, nos hace muy muy felices. Son años de mucho esfuerzo, de una apuesta muy fuerte por estas viñas viejas que ahora tiene su recompensa”, asegura. “Hemos hecho un trabajo muy minucioso. Hemos ido cepa a cepa trabajando individualmente. En algunos casos eran cepas prácticamente moribundas de cuyas raíces, con mucha paciencia, hemos ido consiguiendo que la planta saliera de nuevo adelante, se formara y volviera a dar fruto”, explica Ismael Sanz. “Es un proceso lento, que exige mucha dedicación, pero también muy emocionante”, asegura. “Cuando llegamos la situación no era buena. Hemos vallado la parcela para reducir los daños de los distintos animales, hemos incorporado materia orgánica al suelo, hemos tratado de reducir la presión que ejercían los árboles colindantes… y así, poco a poco, hemos conseguido que este viñedo saliera adelante”.
“La primera añada que pudimos sacar tras el plan de recuperación fue la 2013 y con ella se abría la esperanza de trasladar a la botella lo que es un viñedo excepcional”, asegura Jaime Suárez. Desde entonces, “hemos continuado con este trabajo porque estamos ante un patrimonio único que estamos comprometidos a mantener y a mostrar lo que es capaz de ofrecernos”, explica.
EL TERROIR
La Roza se encuentra en un claro de un bosque de encina y monte bajo, sobre una terraza a 965 metros que da inicio al Valle de Atauta por su vertiente este. Este terroir se compone de 2,29 hectáreas de viñas distribuidas en 19 parcelas. De entre todas ellas, 3 parcelas, 0,24 hectáreas y 689 cepas destacan por su calidad y con ella elaboramos este vino tan excepcional.
El suelo de La Roza cuenta con 2 metros de profundidad y es lo que marca el carácter de este vino. “60 cm de arena suelta con numerosos cantos rodados de tamaño medio, seguidos de otros 40 cms de arena mezclada con arcilla, nos aseguran un carácter maduro y una sedosidad que constituirá el ADN de este vino”. “Posteriormente, 1 metro de arcilla roja antes de que las raíces de la planta se claven en la roca madre de caliza descompuesta aporta frescura y una estructura discreta, pero que parece eterna en boca”.
SOBRE BODEGA DOMINIO DE ATAUTA
Bodegas Dominio de Atauta fue fundada en el año 2000 con el propósito de elaborar vinos que reflejen la singularidad de un valle único dentro de Ribera del Duero, una región vinícola poco reconocida en ese entonces. En 2009, la bodega se unió a Terraselecta, una compañía que trabaja con viñedos en ocho Denominaciones de Origen en España. El valle con más de 500 años de tradición vitivinícola se distingue por su altitud, clima extremo y una diversidad de suelos que permite crear vinos con una gran capacidad para expresar su origen.
La filosofía que ha seguido Bodegas Dominio de Atauta se basa en cuidar meticulosamente el fruto desde el viñedo hasta la bodega, con una intervención mínima. Gracias a estas prácticas y al factor humano, los vinos de Dominio de Atauta han alcanzado un reconocimiento destacado en Ribera del Duero, posicionándose entre los más apreciados de la región.