El 44% del total es de variedades blancas, el porcentaje más alto en la historia de la Denominación de Origen
Cumpliendo las previsiones calculadas al principio de la vendimia, Somontano concluye hoy la campaña con 15.240.000 kilos de uva en las bodegas acogidas a su sello de calidad.
La vendimia comenzaba el pasado 11 de agosto con la cosecha de los primeros racimos de la uva blanca Gewürztraminer y concluye esta misma mañana con la recogida de los últimos kilos de las uvas tintas Garnacha Tinta y Cabernet Sauvignon en una de las zonas de mayor altitud del Somontano.
Destacable es el porcentaje de uvas blancas recogidas este año que suma el 44% del total y supone un porcentaje histórico frente al habitual que era de entre el 20 y el 35%. El 56% restante de la vendimia ha sido de las uvas tintas entre las que la Cabernet Sauvignon sigue siendo la que lidera las cantidades recogidas con 3.201.260 kilos. Tras ella, Merlot, con 2.347.810 kilos; Syrah, con 1.025.681; Garnacha Tinta, con 872.253; Tempranillo con 871.790; Pinot Noir, con 72.830; Moristel, con 53.780 y Parraleta, con 49.180 kilos.
En cuanto a las variedades blancas, tres baten su récord histórico: la Chardonnay con 4.163.416 kilos; la Gewürztraminer, con 1.463.830 y la Sauvignon Blanc, con 478.010. Respecto al resto de uvas blancas, de Macabeo se han recogido 271.420 kilos; de Garnacha Blanca, 188.800; de Riesling, 178.020 y de Alcañón, 1.920 kilos.
La cantidad de uva recogida supone casi un 28% menos que la vendimiada el año pasado, año que registró una de las cosechas más cuantiosas de la historia de la Denominación con más de 21 millones de kilos de uva recogidos. La cosecha media de los últimos 10 años es de 18 millones de kilos. Respecto a esa cifra media, la reducción de este año ha sido del 18%.
La alta cifra de 2019 sumada a los daños ocasionados por el pedrisco sufrido en una amplia zona de la Denominación en las jornadas del 29 de mayo y el 16 de junio, heladas primaverales puntuales y las consecuencias de las abundantes lluvias registradas que favorecieron el corrimiento fisiológico de la flor en algunas variedades de uva son las causas que explican esa reducción en la cantidad de uva recogida este año que ha dado como rendimiento medio 5.170 kilos por hectárea.
Pese a perder cantidad de uva recogida, la calidad de la vendimiada ha sido muy buena, aspecto que es reflejo del trabajo constante y extraordinario de los viticultores de la Denominación de Origen frente a la complejidad del año climatológico. Las uvas han visto reforzado su potencial aromático y una acidez que dará como fruto grandes vinos blancos y rosados y también una larga vida a los vinos de guarda como son los fermentados en barrica, crianzas, reservas, grandes reservas o elaboraciones especiales.